HISTORIA DEL MAQUILLAJE(II)

Grecia, el cuidado al cuerpo era donde más hincapié hacían los griegos, los cánones de belleza no toleraban ni la grasa ni los senos voluminosos, cultivaban el cuerpo para conseguir la perfección estética.
La cosmética vivió un período glorioso, sobretodo en la utilización de los aceites. Los aceites perfumados se aplicaban después de los baños o de los masajes y los elaboraban de distintas flores como las rosas o el jazmín, entre otras. También el cabello lo cuidaban mucho y elaboraban tintes con extractos naturales.
En cuestión de piel, su afán por blanquearla se extendió por todas las culturas,utilizaban polvos blancos a base de caolín,tiza y cal. El maquillaje de las mujeres en Atenas se basaba en el color azul para los ojos, las mejillas las coloreaban con carmín al igual que  los labios.

Roma, en el Imperio romano  la estética constituyó una autentica obsesión, tanto los hombres como las mujeres se maquillaban, peinaban y depilaban por igual.
Baños,masajes, vestidos, peinados o el cuidado al cuerpo no eran exclusivos del sexo femenino, si no que todos los romanos querían embellecerse y cuidarse.
Debido al tráfico de esclavos de los territorios germánicos, llegó la obsesión del cabello rubio, crearon formulas y ungüentos para cambiar el color. Los tocados también eran muy importantes, los creaban con perlas,telas flores,mallas bordadas, hasta conseguir el tocado más refinado.
El maquillaje continuó con la piel empolvada mediante polvos blancos,cejas y labios muy maquillados  mucho colorete.

Edad media, con la edad media llegó el decaimiento de la estética, debido  a las frecuentes guerras y las grandes epidemias y todo esto provocó un parón en cuestión de embellecimiento.

Renacimiento, tras varios años dejando a un lado la estética, con la llegada del Renacimiento los valores estéticos tomaron un nuevo impulso. La sensibilidad por el arte, la filosofía y la cultura en general,adquieren una importancia clave.La estética,en todos los campos creativos,llega a cotas refinadísimas.La belleza lo abarcará todo y por tanto la estética femenina formara parte de esta armonía que envuelve la Italia renacentista. Este país se convertirá en el centro europeo de la elegancia. En el siglo XVI los monjes de Santa María Novella, crean el primer gran laboratorio de productos cosméticos y medicinales.
El ideal de belleza de las mujeres nobles consistía en tener un cuerpo de formas muy curvadas, la frente alta y despejada, sin apenas cejas y la piel blanquecina.
En este mismo siglo, Catalina de Medicis, interesada en todo lo referente a la estética, dedico parte de su tiempo al estudio de ungüentos y combinaciones de cremas, Más tarde al convertirse en reina de Francia, llevó consigo a los mejores especialistas en perfumes de Florencia,quienes se impusieron en el arte de la perfumeria.

El siglo XVIII,  desde finales del siglo XVII y durante todo el siglo XVIII, las mujeres parisinas tendrán la "fiebre del colorete". Todas siguen el mismo patrón: Labios en forma de minúsculo corazón, extravagantes y empolvadas pelucas, mejillas enrojecidas con mucho colorete, polvos esparcidos por el cuello y los hombros, con lunares coquetamente repartidos por la cara y la espalda. Los polvos se usaban con generosidad; para las pelucas, harina de trigo y para la cara, harina de arroz.

 

Mary Torres